Cultura

Peregrinación a Tierra Santa

Por: ELU Admin

Elena de la Iglesia, 3º de la ELU

08:00 horas, 6 de febrero. Uno apura para ir al trabajo o a la universidad y, aunque la calle, el autobús o el metro, la obligación y la devoción, aunque el gentío y la confusión de voces madrugadoras le recuerdan que está de vuelta en la rutina, uno tiene la cabeza en otro lugar y siente cierto dolor en el pecho con fuente en la melancolía. No me gustaría que esta crónica se quedara en una mera descripción del maravilloso itinerario seguido, sino que espero que, quienes me hayáis acompañado os identifiquéis con muchas palabras y, quienes no, que entendáis lo que hemos sentido y vivido, y que veáis aquello que seguimos reteniendo en nosotros tan intensamente. Y, es que, de algún modo, uno sabe que ni quiere ni puede vivir igual que antes después de nuestra estupenda peregrinación a Tierra Santa.

Cuando nos juntamos por fin el martes 31 de enero en el aeropuerto de Madrid, era tan pronto que nadie era consciente todavía de que estábamos embarcando hacia Tel Aviv (Israel), circunstancialmente, claro está, pues nuestro destino siempre fue Tierra Santa. El aeropuerto Ben Gurion nos recibió con los brazos más abiertos de lo que quizá esperábamos. Y, allí también, nos esperaba el Padre Rafa para recibirnos con una de sus características brillantes sonrisas. Estoy segura de que, quien haya pasado tan solo un segundo con él, da gracias por haberle conocido porque, mirando sus ojos y escuchando en sus palabras la Palabra, uno sabe que Dios realmente le pidió sus manos.

Cualquiera de nosotros juraría haber llegado completamente de noche al que sería nuestro alojamiento durante los siguientes dos días, pero la realidad es que apenas eran las 18:00 de la tarde. Había algo de especial en la oscuridad de Galilea, que por algunas horas quiso escondernos su mar. Con ganas de conocerlo, te levantas pronto y vislumbras el amanecer, en una tierra en la que no paras de pensar que Jesús también admiraba el trazo de los montículos que se elevaban frente al mar desde cada una de las ventanas. La primera mañana se levantó entre nubes, pero estamos de acuerdo en que el cielo así tenía un cierto encanto. En el Monte de las Bienaventuranzas, escuchando esos anhelos que llevas en el alma, aunque a menudo no sepas nombrarlos, mirabas al mar y parecía quieto y hasta se detenía el tiempo y el goteo de la lluvia dejaba de hacer ruido. Después, con el romper de las olas, el “te quiero” de San Pedro, de cuya casa vimos las ruinas, resonaba especialmente fuerte ante el “¿me amas?” de Jesucristo. No te crees merecedor, pero Él sí te ama. Caían rayos en Cafarnaúm que no hacían sino aumentar tus ganas de ver, pasear y reflexionar a la intemperie. Como inmersos en la Biblia, en medio de una neblina subimos con la ayuda de algunos taxis al Monte Tabor de la Transfiguración de Jesús. A sus pies, de forma algo más turística que peregrina, descansamos con un refrescante zumo de granada, ¡y eso que calor precisamente no teníamos! El día lo terminamos con una Adoración al Santísimo en la asombrosa Capilla de la Barca, donde no es ella la que se inunda, sino más bien son tus ojos los que no saben si aguantarán sin temblar una canción más.

En Caná, nos encontramos con la misma pregunta que recorrió con nosotros Santiago el pasado verano. Reconocimos que sí existe un amor pleno y para siempre, aunque la duda sigue abierta en el ámbito más terrenal. Nuestra marcha de la Iglesia de las Bodas de Caná, en medio de matrimonios procedentes de todo el mundo que venían para darnos envidia con su amor, fue algo abrupta, pero por ello también divertida. Esa tarde, en Belén, nuestros rezos también fueron un poco interrumpidos, y al final las dos salidas se quedan como anécdotas y como prueba de que la fe y la risa son más que compatibles. Si ese 2 de febrero hubo algo que nos removió en especial, creo que fue la entrada en Palestina a través de un checkpoint o puesto militar. ¿Cómo puede haber hoy día tales muros y fronteras? ¡En Tierra Santa! Nuestros ruegos espontáneos por la paz allí y en el mundo entero, por los sacerdotes, por los cristianos perseguidos y por aquellos que todavía no ven la Luz son ya una parte más de nuestro día a día.

La Basílica de la Anunciación, donde “el Verbo se hizo carne” fue, sin duda, una de las visitas más emocionantes de nuestra peregrinación. Primero, paseabas por las afueras de aquella imponente y atractiva iglesia de Nazaret, como queriendo dar un rodeo, ante la inquietud de lo que te esperaba en su interior. Entras. Enmudeces. Porque la Virgen María primero fue una joven. Ante los restos de su casa, te imaginas sus miedos e inseguridades, sus dudas y preguntas, y apenas puedes hacer más que caer de rodillas ante la gruta de la Anunciación, en el nivel inferior de la Basílica. Unas rocas que parecían gritar conformaban un habitáculo pequeño en el que se dio el sí más grande y estremecedor de la Historia. En un espacio tan cercano y envolvente, te recorre un tembleque de arriba abajo. Tu mente agoniza en paz, recordando momentos pasados de inmovilidad e incredulidad, de muchos noes que creías haber justificado equivocadamente usando tan solo la razón. A la salida, alguien se te acerca y te pregunta que por qué nos cuesta tanto dar un sí en mayúsculas, un sí con voz seria y paso firme, y enseguida comprendes que nadie en esta vida está a tu lado por casualidad.

El viernes 3 de febrero nos levantamos con la imaginable emoción que supone asistir a primera hora de la mañana a una misa en el Calvario, de donde nos fuimos con un hasta luego, pues volveríamos el domingo al Santo Sepulcro. Haciendo cola, reflexionas, escuchas, te impacientas: ¿eres consciente de que estás a punto de sentir, no con, pero en ellas, tus manos, el origen de todo aquello en cuanto crees? Es verdad. El reducidísimo tiempo para entrar y la rebosante decoración ortodoxa, con sus innumerables lámparas e iconos, te asfixian, pero verdaderamente más ahonda en tus escrúpulos ese espacio con voz propia. La tarde la vivimos en el Monte de los Olivos, rodeados de un sosiego que, paradójicamente, traía consigo aires de angustia, porque sabes que a menudo duermes cuando te piden que permanezcas despierto.

El sábado recordamos el regalo de la Eucaristía en el Cenaculito, bajo el interrogatorio del entrañable Fr. Artemio y, después, entre vallas y minas, llegamos al Río Jordán. No era, ni de lejos, un río azul precioso ni uno rodeado de viva y abundante vegetación. Banderas y militares de Jordania a un lado, y de Israel al otro. Era un río, en todos los sentidos, algo ruborizado. Pero, si allí vas a renovar tus promesas bautismales, ¿cuánto más importa mancharse los pies de barro? De vuelta al autobús, se te taponan los oídos descendiendo hasta el punto más bajo en tierra firme, a unos 430 metros por debajo del nivel del mar. Allí, en el Mar Muerto, nos escocían heridas, nos sacamos fotos en la orilla y nuestras caras reían. Y, quizá no allí, pero sí que aquí entiendes que tienes todos los motivos para dar muchas gracias por tanta alegría en nuestras vidas. Para poner fin a nuestro recorrido entre barros y sales, nos dirigimos a la “arena” del Desierto de Judea. Frente a nosotros, nada. ¿O todo? Estábamos los unos de los otros lo suficientemente lejos como para hablarle a nuestra soledad. Declives ásperos del terreno ante nuestros ojos en un desierto rocoso que en nada se parecía al sahariano que todos nos habíamos imaginado en aquel lugar en el que Cristo fue tentado. Con la brisa de fondo, tal enclave de frente, con juegos de luces y sombra, de frío y de calor, te sientes verdaderamente abrazado. Abriéndole tu intimidad al cielo, luchando contra todo intento de distracción, gritándole desde dentro al paraje escarpado que no te da miedo, rezando por maravillas en y a través de ti… abres tu libreta y escribes: “¿Hay algo que me pueda decir un hombre con palabras que no me hayas ya dicho Tú en esta pausa? Contigo, no es secreto mi silencio, ni tengo sed solo de agua, pese a encontrarme en el desierto”. Así, 1 hora pasó en 10 segundos y, de repente, te encuentras de nuevo en la mágica Jerusalén. 

Por su parte, el Vía Crucis es uno de esos retos que sabes de antemano que merece la pena afrontar. Caminas el domingo 5 de febrero entre el bullicio y el ajetreo, entre ruidos y muros aprisionadores, por calles estrechas y sobre suelos mojados, rememorando desde la primera hasta la decimocuarta estación. En las primeras estaciones, habrías deseado vivir en la época de Jesús con tal de salir inadvertidamente de entre la multitud de Jerusalén para ayudarle a cargar con el travesaño, en otras, sin embargo, como en la decimoprimera, egoístamente te gustaría ser insensible con tal de escapar del dolor, y en las últimas te quedas de piedra pensando en cuánto sufrimiento puede soportar una madre. Más tarde, con la esperanza fijada en lo eterno y permanente, con la certeza de que ya no quieres vivir a medias, te adentras en el avión que te devuelve a Madrid. Ya en casa, con los pies en el suelo de nuevo, recuerdas que no han faltado ni las compras ni el (más o menos exitoso) regateo, ni el sueño ni el razonable o infundado miedo. Ha habido dulces locales de más y salados momentos. Se te quedan grabados a fuego todas las risas y los silencios. Nos mojamos mucho, hizo frío y viento. A menudo, errábamos graciosamente en nuestro recuento. No olvidarás que estuviste en shabbat en el Muro de las Lamentaciones, con kipá o pañuelo. Y, más que por la obligación, por la experiencia. Todo esto, terrenal y vivido con el cuerpo, también lo incluimos sin duda en nuestros recuerdos.

23:00 horas, 6 de febrero. Uno no tiene prisa por irse a la cama porque quiere que algo dure para siempre. Sabes que eres ahora más culto porque Juan te ha hablado de Historia y etimología y todo ha cobrado sentido. Te das cuenta de que cada sitio ha calado más en ti porque Carola te ha explicado dónde te encontrabas y por qué estaba hecho así. Eres afortunado, porque Esther, María L., Sabrina y María T. están a tu lado y siempre están dispuestas a darte la mano. Rezas y ves a Santa Elena, y tu negación revienta al reconocer que, sin ella, esta peregrinación nunca habría tenido lugar. Rebosas de ternura al pensar en Alessandra, mujer de fe y pasión, que un miércoles 1 de febrero te hizo caminar por Magdala mientras ella corría detrás de Jesús. Pides perdón, y a la vez das gracias, porque tuviste que conocer a Anne Marie un viernes 3 de febrero para convencerte de que ciencia y fe no se matan: ¡cómo se nos encogía el alma al ver Su mortaja, la Sábana Santa! Todo ha acabado y ya duermes, pero sabes que este viaje de vida te acompañará el resto de tus días.

¡Señor Jesús, que te conozca de tal manera que no pueda dejar de amarte, y que te ame de tal manera que no pueda dejar de seguirte!

Vida ELU

mARTEs – Visita al Museo del Prado

Por: ELU Admin

Disfrutar del arte es un gran placer, sí, no hay duda posible. Pero, ¿no es verdad que se hace aún mejor cuando se comparte con amigos? Desde mARTEs lo tenemos claro. Por eso, el pasado sábado 4 de febrero, gracias a la impecable organización de la elu de tercero Rosa Leal, constituimos un grupo de 18 visitantes (entre elus y acompañantes) al Museo del Prado.

Nuestro recorrido partía de una premisa muy, muy atractiva: recorrer los pasillos del Prado en busca de los principales cuadros mitológicos que alberga la colección, guiados por las explicaciones de Rosa. Y, por si os lo preguntáis, nuestra experiencia no decepcionó.

Comenzamos en el Renacimiento italiano de la mano de una pareja de obras de Tiziano, Sísifo y Ticio, pertenecientes a su serie de Los Condenados. Algo se removía en nuestro interior al presenciar los horribles castigos a los que fueron sometidos estos personajes, según el mito. Después viajamos hasta el universo de Velázquez, nuestro maestro del Barroco, y no podíamos evitar sentirnos parte del cuadro, como si su tremendo realismo nos absorbiera entre óleos.
El grueso de la colección, sin duda, pertenecía a Rubens, pintor flamenco que, en palabras de Rosa, “cambió la manera en la que se entendía la pintura” gracias a la fundación de un taller propio con una producción inmensa. Nuestra anfitriona nos explicó cómo el rey Felipe IV mandó llenar de obras mitológicas el edificio llamado Torre de la Parada, siguiendo el relato de Las Metamorfosis de Ovidio. No pudimos detenernos en todas las obras (porque son decenas), pero las seleccionadas fueron sin duda apasionantes.

Tras la visita, algunos elus tuvimos la oportunidad de entablar un diálogo final en un bar de la zona, donde hablamos de arte, sí, pero también de vida, en general. ¡Muchas gracias a todos por venir! Estar con vosotros siempre es motivo de alegría.

Sin categoría

Elumni – Antonio Domínguez

Por: ELU Admin

“La vocación se redescubre continuamente porque nunca se deja de aprender”. Son palabras de Antonio Domínguez #ELUMNI04.

Hoy nos cuenta su experiencia al diseñar su propio puesto de trabajo en Quintas Analytics, los aprendizajes de la organización Databeers Sevilla y el impacto que la Escuela de Liderazgo Universitario ha tenido en su vida. ¡No te lo pierdas esta nueva #EntrevistasELUMNI!

Enlace: https://alumni-ufv.es/es/comunicacion/entrevistas/Antonio-Dominguez

Vida ELU

Elus por el Mundo – Joaquín Delgado

Por: ELU Admin

¡Hola a todos! Soy Joaquín Delgado, elu de tercero y estudiante de Física en la Universidad Autónoma de Madrid. Llevo unos meses viviendo y estudiando en Bruselas (Bélgica), y sin duda creo que está siendo una de las etapas más felices y enriquecedoras de toda mi vida. ¡Os cuento!

El tiempo pasa muy rápido, tan rápido que a veces no somos conscientes de ello, qué me vais a contar… Van pasando los años de estudio y esa idea de ir a estudiar al extranjero que solíamos escuchar de nuestros primos y amigos mayores, de repente está al alcance de nuestra mano. Cuando menos te lo esperas, tu universidad ya ha sacado la lista de destinos y está esperando a que te lances a la aventura. ¡Es tu turno!

Después de mucha meditación intentando encajar las piezas del rompecabezas de ciudades, universidades y oportunidades, elegí Bruselas. Una ciudad llena de cultura y de personas de todas partes del mundo, la capital de Europa. Un lugar que me daba acceso a una infinidad de países y pueblos cercanos y que me ha permitido explotar al máximo el idioma, tanto el inglés como el francés. Un ambiente que jamás habría pensado que en tan solo unos meses podría llamar hogar con tanto orgullo como lo hago ahora.

La vida aquí ha sido como una película, y una muy muy buena. Si algo tengo que destacar de la experiencia que llevo vivida son las personas que he tenido la suerte de conocer, tanto españoles, como belgas, como gente de otras partes del mundo. He tenido el privilegio de encontrar mucha calidad humana, muchísima empatía y gente de la que he podido aprender y aprendo mucho. No puedo sentirme más agradecido.

La Universidad Libre de Bruselas es una pasada. Hay mucho interés y facilidades para los estudiantes, y la alta exigencia te obliga a poner los pies en la tierra. He podido elegir asignaturas muy diferentes al plan de estudios español, como La Estructura del Universo, y estoy aprendiendo a disfrutar cada vez más de cada curso que estudio. Se fomenta el entendimiento de los conceptos más allá de la memorización, hay un interés por la participación y se promueve cualquier tipo de actividad científica en grupo. Además, compartimos muchas asignaturas con estudiantes de otros grados y hay infinidad de asociaciones y actividades entre universitarios, desde cualquier equipo de deporte, hasta grupos de música, orquestas o cursos de idiomas. Se me ha hecho muy fácil sentirme acogido aquí.

Ir de erasmus es un reto constante y sin frenos. Implica estar fuera de tu zona de confort casi todo el rato. Una nueva universidad, un nuevo idioma, nuevas personas y probablemente un estilo de vida totalmente diferente al que estamos acostumbrados.  Soy un afortunado, y he podido no solo conocer Bruselas, sino también viajar por toda Bélgica y por Europa. Tanta facilidad para viajar y moverse conlleva una enorme apertura de mente, y me ha ayudado a relativizar y conocer un poquito más cómo funcionamos las personas. Además, he podido ver a otros elus, que afortunadamente están viviendo su Erasmus en otros lugares. Me asombra ver cómo experiencias aparentemente tan parecidas son tan distintas al mismo tiempo, y poder compartir entre nosotros todo lo que nos está haciendo sentir es todo un regalo.

En definitiva, no puedo expresar con palabras la evolución personal que me llevo de esta primera mitad del erasmus. El Joaquín que llegó en septiembre un poco desubicado, que se enfrentaba por primera vez a la independencia, no tiene nada que ver con el Joaquín que visitaba Budapest o Edimburgo a mediados de noviembre, ¡y mucho menos con el Joaquín que se examina en enero! Me muero de ganas por seguir conociendo, aprendiendo y asombrándome con todo lo que el erasmus tenga que ofrecerme, lo recibiré con los brazos abiertos.

Para terminar, vuelvo a enfatizar que, sin duda, sin las personas que me han acompañado nada de esta experiencia tendría sentido. ¡Y poco a poco me voy dando cuenta de que ni esta experiencia, ni ninguna! Os animo a todos a lanzaros, a conocer, a dejaros asombrar y a compartir… Os aseguro que en seguida os daréis cuenta de que tal vez sois un poquito más felices. Afortunado y eternamente agradecido con Bruselas y con su gente.

¡Nos vemos pronto y a por todas!

Joaquín Delgado

ELUMNI

Elumni

Por: ELU Admin

Nuestro #ELUMNI12 Javier Cano de Dios, estudiante de Ingeniería Industrial, ha sido uno de los seis ganadores del concurso “Identificando Talento” de la Fundación Banco Sabadell y la Universidad Francisco de Vitoria. Las fases han permitido a los estudiantes aprender a enfrentarse a los procesos de selección de las grandes empresas de la mano de profesionales del sector. En este recorrido han desarrollado competencias tan relevantes como el autoconocimiento, la autoconciencia, la inteligencia emocional, el pensamiento crítico, el liderazgo de servicio, la sensibilidad social y la responsabilidad.

“Al principio entré sin expectativas al ser una competición con gente brillante, pero luego me fui olvidando y empecé a disfrutarlo y a conocer a gente de otras carreras”, nos comenta Javier sobre su experiencia. “Me ha ayudado mucho para aprender cosas de mí mismo que no tenía tan claras y no sabía muy bien cómo potenciar”.

¡Enhorabuena, Javier! ¡Nos encanta compartir vuestros logros y reconocimientos!

Podéis leer la noticia competa aquí: https://www.europapress.es/epsocial/responsables/noticia-ufv-premia-ganadores-concurso-identificando-talento-cuenta-apoyo-fundacion-banco-sabadell-20221223170748.html

Vida ELU

Elus por el mundo – María de Jorge

Por: ELU Admin

Hola a todos! Soy María de Jorge, de cuarto de la ELU. Yo no quería irme de Erasmus y, sin embargo, este cuatri en Paris ha sido una de las mejores experiencias de mi vida. Voy a contaros aquí cómo he vivido estos meses.

Estudio Farmacia en la Universidad de Valencia, y he hecho el primer semestre de cuarto de carrera en la Universidad de París Cité (antes Universidad de París V René Descartes).

Yo no quería irme de Erasmus porque, al contrario que muchas de mis compañeras de clase de farmacia, no sentía la necesidad de salir de casa. La verdad es que estaba muy cómoda en Valencia, yendo a la universidad que está a 5 minutos de dónde vivo y a la que cada mañana me llevaba en coche una de mis mejores amigas de toda la vida.

Al final dije que sí porque me ilusionaba París y porque intuía que podía ser un bien para mí, aunque aún no supiera muy bien de qué manera. Me bastaron un par de semanas para saber que había sido una de las mejores decisiones de mi vida.

Estoy feliz de poder haber vivido unos meses aquí y de poder haberlo visto a través de los ojos de con quienes lo he compartido, porque mi Erasmus ha estado marcado en gran medida por la ciudad y por las personas. He aprendido sobre los edificios con Anna, mi amiga de Barcelona que estudia arquitectura, he podido vivir la semana de la moda con amigos a los que les apasiona esta industria, he paseado con Luisa por Saint Germain y las calles por las que ahora vive ella también, he probado el sitio de bocadillos de Sofi, el de los croissants de Inés, o he podido descubrir aquella cafetería del barrio judío con Jaime y Paula y las esculturas del Rodin con Olivia (es su museo preferido) el finde que vinieron las dos de visita.

He podido descubrir París también en lo cotidiano. He ido a clase a mi facultad en frente de los jardines de Luxemburgo, he podido estudiar en la biblioteca delante del Panteón, salir de fiesta y que suene la de Quevedo debajo de la torre Eiffel, ir un día cualquiera a misa a Madeleine, hartarme a crepes, vivir un mundial fuera de casa. Me ha conmovido el impresionismo, me ha asombrado la escultura, y he disfrutado como nunca de los museos. He cogido también algún que otro flixbus (genial para viajes baratos), y he aprendido más francés que nunca. En todo ello puedo decir que he tenido un encuentro con la Belleza, desde la inmensidad de una puesta de sol desde el Sena hasta en la amabilidad de las personas que han acabado por convertirse en verdaderos amigos.

Y lo cierto es que no se acaban las cosas que hacer en esta ciudad. Aun ahora, a dos semanas de volverme, intento hacer una lista de los lugares que me faltan por visitar sabiendo que nunca podré acabar de ver todo lo que me gustaría.

He de decir también que no todo es idílico: la burocracia deja mucho que desear (cuando llegué a mi universidad no aparecía mi nombre en ninguna de las listas de las asignaturas en las que me había matriculado y, por si fuera poco, no existía ninguna persona con el puesto de coordinador internacional). Además, hay que ser consciente de los precios (lejos queda el café con leche de la cafetería de la UV por 1,20€), incluso hay aplicaciones diseñadas específicamente para encontrar los bares en los que la cerveza no cueste un ojo de la cara. Por último, es verdad también que París es una ciudad grande: para coincidir con las personas que quieres ver hay que organizarse, es fácil no cruzártelas.

Pero, aun así, merece la pena. He sido feliz y he aprendido mucho. Como dice Ainhoa siempre, la vida se abre paso. Esa es una de las lecciones que me llevo, la mayor quizás de todo este tiempo: que, a pesar de las dudas y la incertidumbre, a veces basta con intuir que hay algo bueno delante, e ir a por ello. Hacer lo que está en nuestras manos, y en lo que no, confiar y esperar.

Beltrán, que estuvo en París también el año pasado y me ayudó enormemente a tomar la decisión (a quien se lo esté planteando, le puedo reenviar su audio de 8:26 minutos en el que habla exclusivamente sobre el distrito 3), escribía al final de su erasmus, ya en Madrid, que es una verdadera suerte darse cuenta de que siempre vas a tener una casa a la que volver. Cuando yo se lo he recordado en alguna ocasión, él me respondía que para llegar a esa conclusión primero había que salir de ella.

Pues bien, Beltrán: ahora, con más conocimiento de causa, te doy la razón. Es una verdadera suerte tener un lugar al que volver; y que ese lugar esté en Valencia, con mi familia, mis amigos de siempre y mi facultad a cinco minutos de casa, pero que también ese lugar esté en París, en sus calles que ahora también son algo mías, y en las personas que he conocido, que en un tiempo volverán a estar repartidas por España y por el mundo.

Estoy realmente agradecida por estos meses. Si alguno de vosotros, elus, está dudando sobre esto, escribidme, en serio. Estaré encantada de ayudar en lo que pueda.

Un abrazo! Nos vemos pronto.

ELUMNI

Elumni – Tutores de proyectos finales

Por: ELU Admin

¡Muchas gracias a los ELUMNIS que se han ofrecido a ser co-tutores de los elus del Módulo 9! 40 serán los ELUMNIS que asesorarán a los elus de 4º en la realización de sus Proyectos Finales o Artículos de Investigación. Gracias a su liderazgo en el mundo profesional y su paso por la ELU, acompañarán a los alumnos en el broche final de estos cuatro años de aprendizaje, comunidad y servicio.

Ya se ha realizado la asignación de co-tutores y temas en base a su formación e intereses para así comenzar a conocerse y trabajar juntos cuanto antes. La iniciativa es una gran oportunidad para fortalecer la interconexión de estos dos proyectos comunes y dar vida a esa frase que nos ha acompañado y nos sigue acompañando a todos: ¡solo tú, pero no tú solo!

Vida ELU

La Xuntanza

Por: ELU Admin

Este 27 de diciembre, tuvo lugar la primera quedada de los elus gallegos, decidimos hacerlo en La Coruña, puesto que había una exposición de fotografía que resultaba muy prometedora. La reunión comenzó frente a la Iglesia de San Nicolás, donde nos encontramos entre afectuosos y cariñosos abrazos, para poco después dirigirnos al restaurante, donde entablamos conversaciones y reflexiones de lo más interesantes, entre ellas, destacó la idea del bien y el mal, donde la variedad de opiniones sirvió para enriquecernos unos a otros.

Posteriormente, nos dirigimos al muelle de baterías, donde se encontraba la exposición de fotografías de moda, de Steven Meisel, impulsada por la Fundación Marta Ortega cuyos pilares son: Coruña, la moda y la fotografía. Al entrar en ella, pudimos ver un breve vídeo en el que se mostraban relatos de modelos y colaboradores suyos, ensalzando la maestría y la técnica del fotógrafo, al mismo tiempo que leíamos acerca de su vida con anécdotas de lo más curiosas. Entre ellas el origen de su vocación, la que se remontaba a su niñez cuando iba al colegio con una cámara, puesto que en los alrededores de su colegio pasaban modelos, lo que le llamaba la atención. Gracias a esto se convirtió en un gran artista revolucionario que tomó fotografías que nunca antes nadie se había atrevido a tomar, todo esto fue lo que le reportó una gran fama como fotógrafo y le permitió embarcarse en su mayor proyecto profesional, trabajar para la Vogue, creando 28 portadas para esta conocida revista.

Después de verlo, nos dispusimos a abandonar el recinto, y la mayoría de nosotros compartimos una sensación agridulce, al ser conscientes de todo el esfuerzo llevado por el autor pero que no se transmitía al faltar contexto sobre lo que él nos quería compartir. Finalmente dimos un paseo por los principales “landmarks” de la “Ciudad de Cristal”, nombre para referirse a La Coruña que viene dado por los edificios de la Marina cuyas impresionantes fachadas de galerías blancas ornamentan esta simbólica avenida, por la cual paseábamos y que nos condujo al Baúl de los Recuerdos, una mítica librería, en la que pudimos compartir opiniones sobre los libros apilados. Finalmente el día no pudo terminar sin las tradicionales castañas de la Calle Real. Esto fue un breve resumen de nuestra quedada, “da nosa xuntanza”, en la que nos prometimos hacer otra tan pronto cómo pudiéramos.

Vida ELU

Una gota de agua más – Cabalgata solidaria

Por: ELU Admin

Cristina de Alfonso y Elena Sánchez, 3º ELU 

Qué mejor momento que la Navidad para darse a los demás, para agrandar el corazón y para llevar al mundo aquello a lo que estamos llamados a ser y dar. Y así, a través de una invitación inesperada, llegó entre nuestras manos un auténtico regalo en el que no pudimos disfrutar más.

El 4 de enero, cumplimos el sueño de todo niño: ser paje.  

Cooperación Internacional es un organismo que nace de la necesidad de cambiar el mundo perseguida por una certeza: somos nosotros los agentes de cambio. Así, a través de infinidad de proyectos, colaboraciones de distintas entidades, programas de voluntariado y acciones sociales; persiguen, día a día, su objetivo de trabajar por y con los demás.  

Todos los años, organizan una Cabalgata Solidaria para que los niños de la Cañada Real, puedan recibir la visita de sus Majestades de Oriente. Tras unos años parado por la pandemia, retomar esta iniciativa era una fuente inmensa de ilusión y, en nuestro caso, podernos convertir en pajes por primera vez, lo convirtió en un encuentro más especial aún. 

Llegamos allí pronto a un barrio que aún dormía y, donde, reinaba el silencio entre sus calles inundadas por barrizales. Apenas había camino, pero unas grandes pinturas adornaban sus muros y llenaban de color aquel lugar. Allí, nos dimos cuenta de que la” periferia” no debería ser un punto olvidado en el mapa ni tampoco una excusa para alejarnos de aquel lugar. A tan solo media hora de nuestras casas, se abría una realidad distinta y veríamos, a lo largo de la mañana, cómo nos sorprendería. 

Puestas en acción con nuestro disfraz y acompañadas por un grupo de jóvenes inquietos, empezamos a preparar nuestras carrozas repletas de caramelos, a decorarlas con cuidado y a llenarlas de música para animar a todos sus vecinos. Y así, una vez empezó, los niños y sus familias salieron a la puerta de sus casas para saludarnos e, incluso, para acompañarnos durante todo el recorrido.  

Sus miradas se iluminaban al vernos pasar y su “gracias” era infinito, sincero y emocionante. La felicidad que transmitían los padres mientras contemplaban a sus hijos, es algo que también nos llevamos para siempre. Sin ser demasiado conscientes, éramos la ilusión de su Navidad y, por cómo nos miraban, por la alegría con la que nos acogieron y sus sonrisas delatadoras, conseguimos despertar a una población atravesada por duras circunstancias, por grandes dificultades socio-económicas y por una estructura de vida tan distinta a la nuestra que conlleva a la preocupación, incertidumbre y tristeza.  

Nos llevamos su cariño y su forma de mirarnos. Ellos nos volvieron a recordar que la Navidad se vive en lo pequeño, en lo sencillo, disfrutando de la cotidianidad y, convirtiendo lo “ordinario”, en instantes extraordinarios. En aquella mañana que compartimos con ellos, volvimos a reafirmarnos en lo valioso que es salir al encuentro del otro, independientemente de las circunstancias. Al fin y al cabo, cualquier dificultad pasa completamente a un segundo plano cuando se trata de darse a los demás. 

Os dejamos algunos instantes en los que, por un momento, se congeló el tiempo y donde, su única preocupación, era conseguir algunos caramelos. Lo que ellos no sabían es que, mientras que llenaban sus bolsillos, nosotras seguíamos llenando nuestro corazón. 

Ojalá la vida nos deje seguir coleccionando esas miradas donde todo se detenga y no importe nada de lo demás. 

Vida ELU

Elus por el mundo – Clara Sánchez

Por: ELU Admin

¡Hola elus!

Soy Clara Sánchez Fernández-Pedraza, elu de 4º y estudiante de Derecho en la Universidad Complutense de Madrid. Desde que era pequeña la idea de irme de Erasmus rondaba por mi cabeza y, debido a las características de mi carrera, consideré oportuno realizarlo en mi último año ya que podía estudiar las optativas más internacionales y universales de mi plan de estudios. Así, entre todos los destinos que me ofrecían, escogí Budapest, una ciudad maravillosa en la que estoy viviendo una experiencia increíble. Con muchísima ilusión, ganas y nervios llegué a mi Universidad (National University of the Public Service), y para mi sorpresa – y suerte – ¡descubrí que era la única española en toda la universidad! Así, el inglés estaba asegurado desde el minuto uno.

En cuanto a las clases, pude escoger asignaturas que me ofrecían una formación más práctica y dinámica, en las que se interactuaba mucho durante las sesiones y parte de la evaluación consistía en presentaciones de 30 minutos exponiendo el tema que hubieras investigado. Además, se fomentaban mucho las conferencias sobre temas geopolíticos de la actualidad que me han permitido conocer más el panorama internacional. Y, aparte de lo académico, el deporte era uno de los pilares de la universidad, fomentado a través de los diferentes equipos de fútbol, baloncesto, hípica, equitación… Como con las instalaciones que ponían a nuestra disposición a un precio muy económico. Sin duda, lo mejor de la universidad ha sido el grupo de internacionales que hemos hecho, compartiendo muchísimo tiempo juntos tanto en la universidad como fuera de ella. De esta manera con las clases, actividades y amigos de la universidad he vivido en un ambiente internacional al completo.

Así, cuando llegaba a mi piso en el centro de Budapest, que compartía con tres españolas y una andorrana, me sentía como en casa. Cinco chicas, completas desconocidas al principio, y que a lo largo de los cuatro meses viviendo, compartiendo y creciendo juntas, la amistad ha venido sola. Cada una con nuestra personalidad y dando lo mejor de nosotras para generar un buen ambiente de confianza y generosidad. ¡Hasta hacíamos compra conjunta y compartíamos la comida! Lo más parecido a una familia que te puedes encontrar de Erasmus. Y, además, ha sido con ellas con quien he viajado durante estos meses.

Porque aparte de lo que os contamos hace un tiempo Blanca, Jorge y yo en la Newsletter sobre el transporte, la gastronomía y la gente de Budapest, otra de las maravillas de esta ciudad es su ubicación en Europa. Viena, Bratislava, Cracovia, Serbia y Praga son ciudades que he tenido la suerte de conocer en estos meses y que me han hecho empaparme de su historia y, principalmente, de los acontecimientos de la Segunda Guerra Mundial, con los estragos que causaron el nacismo y comunismo en ellas, como nunca antes lo había hecho. Es impactante ver cómo en todas ellas hay un free tour sobre “El barrio judío y la Segunda Guerra mundial” en los que te cuenta cómo se vivió aquello en estos países y cuánto ha marcado a la sociedad y a su gente.

Escribiendo estas líneas todavía me queda un mes más para terminar esta gran experiencia. No obstante, a día de hoy soy consciente de cuánto he aprendido, vivido y conocido durante estos meses. Vivir fuera de casa, en el extranjero, con otro idioma y cultura completamente diferentes a la tuya, te presenta situaciones que, más o menos agradables, tienes que hacer frente y, sin duda, te ayudan a crecer, ser consciente y valorar cuánto cuestan las cosas, la actitud con la que lo quieres vivir, saber lo que merece la pena y dedicarle el tiempo que necesita.

Y, sobre todo, me reafirma aún más un lema que es de esta casa, y es que “La felicidad sólo es real cuando es compartida” y en mi caso no habría sido así de no haber tenido a las personas con quienes lo he vivido y con quienes he compartido mi experiencia al volver a España.

Os animo a todos los que podáis, de decir que sí a la oportunidad de hacer un Erasmus y vivir así una de las mejores experiencias de vuestras vidas. ¡Nos vemos pronto!

Un abrazo,

Clara

Vida ELU

Elus por el Mundo – Santi Bercedo

Por: ELU Admin

¡Hola a todos!

Soy Santiago Bercedo alumno de 4º de la Escuela de Liderazgo Universitario y estudio un doble grado de Ingeniería Industrial y Administración y Dirección de Empresas, en I.C.A.I.

El año pasado se me presentó la oportunidad de aplicar para cursar el último año de ingeniería en un país extranjero y desde septiembre estoy viviendo en Estados Unidos, concretamente en Minnesota, el estado de los 10.000 lagos.

La vida en un campus americano.
Estoy estudiando en la University of Minnesota, cuyo campus cuenta con aproximadamente 51.000 estudiantes y se encuentra repartido por dos ciudades, las Twin Cities o, mejor dicho, las ciudades gemelas: Minneapolis y Saint Paul, divididas por el río Misisipi. El hecho de que la Universidad sea tan grande permite albergar grandes laboratorios y recursos enfocados en la investigación y de los cuales he podido hacer uso en alguna asignatura.

En cuanto a la gente, sobre todo las primeras semanas, Vicente (otro compañero de I.C.A.I.) y yo, nos rodeamos del resto de alumnos internacionales por tener la misma sed de conocer y descubrir todo lo nuevo que se nos presentaba por delante. Hemos conocido a gente de todos los rincones del mundo: de China, Australia, Alemania, Suecia, Inglaterra, Colombia, Francia o Noruega, además de otros muchos españoles.

Después, durante los primeros días recorriendo las calles de Minneapolis, nos quedábamos sorprendidos de que todo el mundo nos sonriera al cruzarnos con ellos. Y es que aquí, en Minnesota, hay una expresión conocida como Minnesota Nice, entendida como que la gente tiende a ser inusualmente cortés con los desconocidos.

Así que no tardamos mucho tiempo en hacernos nuevos amigos americanos y descubrir la verdadera cultura desde el “interior”. España gusta, y gusta mucho. Cada vez que digo que soy de España la gente se queda impresionada y empezamos a hablar de Madrid o Barcelona y, como no podría ser de otra manera, del fútbol español. El caso es que no tardamos en empezar a ir a los partidos de fútbol americano o hockey sobre hielo de la universidad. ¡Menudo ambiente! Los estudiantes de Minnesota nos llamamos los Gophers y a los equipos deportivos Minnesota Golden Gophers. El estadio de fútbol americano tiene una capacidad de 51.000 personas y todos los allí presentes (antiguos alumnos, padres y actuales estudiantes) animan al grito de Go Gophers!

La universidad también cuenta con su frat row, con sus fraternidades y hermandades, pero eso ya es otra historia. Lo que especialmente me gusta de esta universidad es que puedes intercalar vida de campus con vida de ciudad, teniendo Minneapolis y Saint Paul a tan solo unos minutos en trasporte público.

El frío no nos para.
El frío era una de mis grandes preocupaciones antes de venir a este estado. La universidad cuenta con pasadizos subterráneos, el gopher way, para conectar los diferentes edificios y no tener que salir a la calle. Además, en Minneapolis existe el skyway system que se podría definir como pasarelas climatizadas entre los grandes rascacielos para recorrer el centro urbano sin tener que salir a la calle.

Yo ya he llegado a experimentar lo que supone una sensación térmica de -20ºC. Pero pensé que iba a ser mucho peor; buen abrigo, buenas botas y para delante. También os diré que me han dicho que lo peor todavía está por llegar, será en el mes de enero donde, según los locales, “no podrás a salir a la calle con el pelo mojado porque por las bajas temperaturas se te congelará y te lo podrás cortar con la mano.”

El intercambio da para mucho.
Durante mi estancia aquí he tenido la suerte de recorrer algunas de las grandes ciudades de Estados Unidos como Nueva York, Chicago o Los Ángeles. Y no os voy a engañar, impresiona ver como cada estado es totalmente diferente.

Es la primera vez que “cruzo el charco” y me esta encantando poder conocer la cultura americana de primera mano. Este intercambio está siendo una experiencia única. Nueva gente, nuevos sitios, nuevo estudio y sobre todo muchísimo disfrute. Ahora tocan exámenes finales, así que muchísimo animo a todos.

Aprovecho para desearos una feliz Navidad y muy felices fiestas.

¡Un saludo fuerte!

Santi.

ELUMNI

Encuentro ELU Andalucía

Por: ELU Admin

Mercedes Sierra y Pepe Yáñez, 3º ELU

Cualquier excusa es propicia para fomentar un encuentro, solo que esta vez no queríamos limitarnos a los elus de Sevilla. Decidimos romper con los esquemas y organizar algo que nunca se había hecho: un encuentro de la ELU, pero extendido a toda una comunidad autónoma -que no podría ser otra que Andalucía-. Con varios meses de antelación y muchas cosas por hacer, emprendimos nuestra aventura de llevar los famosos findELUs a nuestra tierra. Ponencia, grupos de trabajo, turismo y ¡mucho encuentro al estilo ELU! Todo esto no lo hicimos solos, sino que todo fue posible gracias a la colaboración y el trabajo conjunto de eluss y Elumnis, consiguiendo así dar forma a un día único y que todos tenemos ganas de repetir –pequeño spoiler, ¡ELU Andalucía no para!–

En primer lugar, tuvimos la suerte de contar con la presencia de Doña Adela Muñoz, Catedrática de Química Inorgánica de la Universidad de Sevilla. Adela nos mostró desde su experiencia el sentido del liderazgo: nos enseñó como ella misma había llevado la vocación y pasión por lo que estudiaba a todos los rincones de su vida; desde la docencia al teatro pasando incluso por la publicación de una serie de libros. Nos enseñó que para ser buenos líderes, tenemos que aprender a equivocarnos, ser constantes y no dejar de hacernos preguntas por lo que hay a nuestro alrededor. A continuación, decidimos llevar a cabo aquello que más nos gusta después de los fines de semana en la UFV: los grupos de trabajo. Juntos, descubrimos la importancia de cómo llevar a la práctica, a nuestra universidad y en definitiva, a nuestras vidas, el liderazgo. Después de una mañana intensa que a la vez se pasó volando, con muchas ganas de seguir hablando y siendo testigos de lo que estábamos viviendo -para poder traerlo aquí y que seáis líderes allá donde estéis- nos fuimos a la comida, ¡qué ya era hora!

Después de comer, teníamos reservada como actividad cultural y lúdica una visita al Parque de María Luisa –icónico de la ciudad de Sevilla, pues contiene, entre otros, la Plaza de España y la Glorieta de Bécquer– en vehículos a pedales de cuatro y seis plazas. Tanto elus, elumnis como mentores, disfrutamos entre risas recorriendo todos los rincones de uno de los mejores paisajes que encontramos en Sevilla.

La jornada continuó con un agradable paseo a orillas del Guadalquivir, marcado por esas conversaciones que nos caracterizan en la ELU, donde además, los alumnos de primero se dieron a conocer y nuestros queridos elumnis continuaron iluminándonos el camino, como es de costumbre. Tras una pausa en una tradicional cafetería en el centro histórico de la ciudad, terminamos nuestro encuentro en la iglesia de la hermandad del Valle, en la que pudimos ver uno de los belenes más representativos en estas fechas.

¡Esperamos que todos los asistentes hayáis disfrutado este día, que con tanta ilusión hemos preparado! Para los que no habéis podido venir, ¡no os preocupéis! Nuestra intención es mantener este encuentro de forma anual (aunque este año pinta fuerte…), teniendo como sede en cada ocasión las distintas provincias de Andalucía. Para finalizar, nos gustaría pasarles el testigo a otras comunidades ELU como Madrid o la Comunidad Valenciana, pues “Liderar es ser testigo” y creemos que no hay mejor forma que siéndolo en compañía de los nuestros.

Vida ELU

Siete elus participan en el Programa Sputnik

Por: ELU Admin

Ana Santamaría, 3º ELU 

Sputnik es un programa compuesto por tres seminarios (Bootcamp, Tech camp y Start-up camp) que persigue el objetivo de formar a 5000 jóvenes andaluces en 10 años y despertar en ellos las ganas de hacer algo grande. Juan Martínez Barea, el director del proyecto, mientras realizaba un MBA (Máster of Bussiness Administration) en el MIT se dio cuenta de que era el único español del sur. Se preguntó: “¿dónde está el talento del Sur?”. De ahí surgió la idea de Sputnik. 

Este año ha tenido lugar la tercera edición del programa, a la cual hemos asistido varios elus: Rodrigo Pérez y Estela Chocano (Madrid), Marisa Rico (Valencia), Ramón Torres, Pepe Yáñez, Carlos Ferreiro y Ana Santamaría (Sevilla); además de otros amigos. 

En el Bootcamp, que tuvo lugar en septiembre, tuvimos la oportunidad de escuchar a varios ponentes que nos transmitieron valores como la curiosidad por explorar el mundo, de la mano del aventurero Nacho Dean, la valentía como hábito que requiere entrenamiento, gracias al filósofo David Cerdá, o el espíritu de superación que se palpaba en la vida de la atleta paralímpica Sara Andrés. 

En el Tech Camp de noviembre, nos presentaron las tecnologías que están en punta de lanza en el mundo actual. Hablamos de inteligencia artificial, realidad virtual, metaverso, biotecnología, blockchain y movilidad autónoma, entre otras. Era, más que un intento de profundizar en la parte técnica, un escaparate al que nos asomamos para ver con una nueva perspectiva cómo va a ser “el mundo que viene” (así se llama la fundación que da vida al programa Sputnik). Nos hablaron de una gran revolución tecnológica que va a tener lugar tarde o temprano y nos invitaron a ser nosotros quienes la lideremos.

Por último, en diciembre hemos asistido al Start-up Camp, en el que hemos podido entender mejor qué es una start-up y cuál es su potencial. Identificar un problema social, sobre todo si es algo que nos toca de cerca, planificar, buscar financiación, escalar, aprender a virar el proyecto o venderlo si es lo que la situación requiere. Estas son, de modo general, las etapas en el proceso de las start-ups en las que fuimos profundizando, acompañándolo de un intento de responder a la pregunta de ¿por qué emprender? y ¿por qué vale la pena lanzarse a montar una start-up?

Un cañonazo de optimismo. Eso pretende ser Sputnik. Creo que a todos nos ha calado de una manera u otra el mensaje que hemos recibido, que cada uno de nosotros ha acogido en la medida en que hemos sentido que algún ponente o alguna idea en especial nos removía por dentro. Si algo añadimos a nuestra mochila de aprendizajes después de esta experiencia es que, desde luego, no tenemos motivos para no aspirar a algo grande. 

Vida ELU

mARTEs – Dos viejos comiendo sopa

Por: ELU Admin

Hubiera estado bien que Goya hubiera pintado 13, y no 14 de las llamadas pinturas negras. Para aquellos que no se hayan dado cuenta, por si el cuadro no dejaba mal cuerpo suficiente, hoy es martes 13.

Los estudios radiográficos de las pinturas han permitido conocer que debajo de éstas había otras, de distintos motivos y estilo, parcialmente reutilizadas por Goya y parcialmente tapadas. Sabemos que estuvo gravemente enfermo en los últimos meses de 1819 -por lo que podía haber empezado a pintar en los meses anteriores, parar con ­motivo de la enfermedad y, en buena medida bajo la influencia de ésta, cambiar el tono de las pinturas que reemprende en 1820. Esa es una de las teorías acerca de esta obra, hay más, pero también queremos dejar abierta la puerta para tu curiosidad. Lo que sí que se sabe es que las pintó sobre la pared de su casa, porque ¿a quién no le apetece pintarse unos cuadros como los de esta serie para que le acompañen en un lluvioso martes 13?

Hoy es martes de arte, pero también hoy miles de personas sentirán que su martes ha sido maldito por la coincidencia de número y lugar en la semana. Al final el arte tiene algo de misticismo y, si alguien dudaba, estoy convencida de que con este cuadro de Dos viejos comiendo sopa más de uno se ha quedado impresionado (a mí personalmente me ha dado un poco de mal rollo). Con un post en una pantalla presumiblemente reducida de móvil, seguramente con resto de huellas por todas partes, hemos conseguido que hayas parado dos segundos tu vida para leer este post. Si eso no tiene algo de mágico, me rindo. También espero que al terminar de leerlo te hayas dado cuenta de que tu suerte ya ha cambiado un poco, pues te has acercado un poco más a la sorpresa del arte. ¡Feliz martes! Y que la buena suerte te acompañe (o algo así era).

Vida ELU

mARTEs – Los amantes

Por: ELU Admin

Seguro que muchos conocéis la obra de hoy: Los amantes, del pintor surrealista belga René Magritte (cuyo cuadro El principio del placer ya protagonizó mARTEs). Si algo amaba este artista, era provocar confusión y reflexión acerca de sus figuras: los críticos se afanaban en encontrar explicaciones que él continuamente negaba, afirmando que no pretendía alcanzar ningún significado profundo. Pero, ¿cómo no pensar que hay alguna conexión entre los motivos que repetía una y otra vez, como una máquina?

Elena Sánchez ha tenido la generosidad de compartirnos sus pensamientos. Es estudiante de tercer curso de Medicina en la Universidad Complutense de Madrid y también elu de tercero. Os invitamos a dejaros llevar por las palabras del texto:

«Dueños del mundo de la eterna prisa, de la infatigable queja, del mínimo esfuerzo, de la pertenencia obligatoria y de mi propia razón como verdad absoluta; parece como si, al igual que representa Magritte en su obra, viviéramos cubiertos por el velo de la ignorancia. Como si hubiéramos perdido la capacidad de abrazarnos con sinceridad y ya no pudiéramos entendernos a través de la mirada sincera.

Rescatar esta obra evoca el reflejo de los tiempos posmodernos en los que vivimos: marcados por el individualismo de una comunidad que no cesa su exigencia a cambio de no ofrecer nada, construido sobre falsas verdades que se consolidan a pasos agigantados, en el que todo tiene una fecha de caducidad y donde, intentando llegar y contestar a lo ‘aparentemente urgente’, nos desviamos de lo ‘realmente importante’. Parece impensable echar la vista atrás, como si quisiéramos huir del legado que nos han dejado tantas generaciones con tesón y determinación. El paso de los años y mi propia experiencia me han corroborado la importancia de vivir el día a día desde el más profundo agradecimiento. No hay mayor acto de humildad que reconocer que somos quienes somos gracias a lo que nos ha sido dado. Alejarnos de todo aquello que atrofia el corazón es un acto de valentía y de paz.

Alumbrar el sendero de todos aquellos que viven bajo ese velo de la ignorancia no es algo sencillo. Decidir ponerse en juego es un acto de generosidad infinito. Es más, tener la posibilidad de abrazar ese vértigo y acoger un nuevo mundo en cada una de las decisiones que tomamos, es la suerte de unos pocos afortunados.

¿Y cómo vivir el día a día sin dejarnos cubrir los ojos? Aspirando a lo grande, apostando fuerte y viendo el mundo con una mirada que confíe en que las cosas pueden cambiar sin las grandes dosis de burocracia mental que, a veces, atrofian el corazón con los años. La edad de los juicios críticos, inconformistas, pero no resabiados; sabiendo exprimir todos los sueños y proyectos que se abren, vírgenes, ante nosotros. Es el momento de disfrutar de los primeros frutos del trabajo bien hecho y el alivio de encontrar luz en las decisiones maduradas con mucho tiempo.

Quizá el secreto esté en agarrarse al presente, por si un día tenemos que prescindir de ello. O, de mirar el regalo que es vivir desde los ojos del anhelo por si, algún día, como “Los amantes”, no somos capaces de verlo».

Vida ELU

Segunda visita de mARTEs al teatro

Por: ELU Admin

El sábado 3 de diciembre un numeroso grupo de más de 20 ELUs (¡incluyendo profesor y varios elumni!) nos reunimos para ir al teatro de la Abadía a ver “Ana contra la muerte”, un drama que venía desde Uruguay.

El argumento de la obra se puede resumir en qué está dispuesta a hacer una madre por su hijo, y la respuesta obvia es todo. Pero en el caso de Ana, la protagonista, no es un todo metafórico ni una forma de hablar. Por salvar a su hijo está dispuesta a hacer absolutamente cualquier cosa. Si bien el montaje de la obra era austero, con la magnífica actuación de las 3 actrices no necesitaba más. Planteaba dudas acerca de la familia, la dignidad de la vida, las desigualdades de clase, la justicia, el perdón, la medicina… en definitiva, dio pie a suficientes temas de reflexión que luego profundizamos en el Bar de Luis tomando unas cervezas y unas tortillas de 10.

Aunque durante la obra se derramó más de una lágrima, fue muy reconfortante el tercer tiempo con gente que hacía mucho que no veíamos y conversaciones que llenan de vida. Os esperamos a todos en la próxima (¡y si alguien quiere proponer alguna obra que os apetezca ir juntos, desde mARTEs estamos encantados!).

Vida ELU

Visita a Barcelona

Por: ELU Admin

El pasado lunes 14 de diciembre María Longás vino a ver a los elus de Barcelona por primera vez en el curso. Su visita fue la excusa perfecta para conocer a los nuevos fichajes, quienes doblan la plantilla. Propusimos para el inicio de la tarde juntos ir a ver La Catedral del Mar, basílica menor que corona el Barrio del Born en la capital catalana. Fue un tiempo precioso, donde pudimos conocer a fondo la historia de esta iglesia denominada “la del pueblo”, debido a su construcción financiada y realizada por los bastaixos (“hombres del muelle”).

Iniciamos la visita en el interior de la iglesia gótica, abierta y acogedora, dividida en tres portentosas naves. Pudimos disfrutar de un tiempo en silencio. A la salida nos encontramos con el famoso tímpano que corona el edificio, realizado tanto con pintura al fresco como con relieves medios. Nos encantó poder descubrir la simbología de todo aquello que parecía decorar las paredes de la famosa catedral del pueblo, gracias a que en aquella época el arte era “la Biblia del pueblo”. Nos dimos cuenta del gusto por entender más la historia de esta tierra mediterránea en la que vivimos y de la que sabemos bien poco. ¡Estamos deseando poder hacer otro plan cultural juntos donde sean los más nuevos los que nos expliquen a los veteranos!

Después de la visita a la Catedral Del Mar, pudimos ponernos al día cenando todos juntos en el Crep Nova. Esta fue una gran oportunidad para conocer no solo a los nuevos elus de Barcelona, que sin duda venían con muchas ganas de participar en cualquier actividad que se proponga, sino también a los ELUMNIS. Guiados por Sabri, los antiguos alumnos de la Escuela nos mostraron cómo son sus vidas después de los cuatro años de formación y dejaron claro cómo se puede aplicar todo lo que han aprendido en la ELU en su vida profesional. Debió de ser increíble para ellos verse reflejados en nosotros e intercambiar miradas que nos unen a pesar de la diferencia generacional.

Después de esta primera toma de contacto, ¡tenemos muchas ganas de que nuestro equipo de Barcelona se conozca más y crezca en el camino de la ELU!

Vida ELU

Elus por el Mundo – Pablo Espinosa

Por: ELU Admin

Querida comunidad ELU:

Os escribe Pablo Espinosa, alumno de cuarto curso de la Escuela. Aunque soy estudiante de tercero de Ingeniería Industrial en la Universidad Carlos III, este año tengo la suerte de poder disfrutar del programa Erasmus en Suiza. Aunque os podría concretar mi experiencia en la ciudad donde está mi universidad, Brugg-Windisch, al ser pequeña y estar un poco en tierra de nadie os contaré mi experiencia de intercambio en toda Suiza en general, ya que tengo la suerte de estar en país relativamente pequeño en el que todo me queda a un paseo en tren como mucho.

Empecemos por el principio. Aunque no fuera una de mis primeras opciones al echar mi solicitud, sabía que era una posibilidad probable por no ser muy querida como destino de Erasmus. Una vez me asignaron plaza y me decidí solo había una idea que allá donde le comentase se repetía: “te vas a un sitio caro y aburrido”. Pues bien, aunque pueda estar de acuerdo hasta cierto punto con lo primero, no puedo estar más en desacuerdo con lo segundo. Os cuento esto principalmente porque desde el primer momento que tomamos tierra un amigo de clase y yo, nos dedicamos a recopilar lo que llamamos “Las grandes mentiras de Suiza”, y como las más de treinta entradas que hemos ideado resumen bien lo que hemos vivido, usaré alguna para este trocito de Elus por el Mundo.

Mentira no.1: En Suiza hace frío
Vale, sí, sé lo que podréis estar pensando: la Confederación no tiene el clima de Córdoba un día cualquiera de primavera, pero tampoco tiene ese frío siberiano que tantos me advertían. Os estoy escribiendo ya entrado diciembre y el abrigo no ha sido realmente necesario hasta hace una semana o dos. Además de esto, quitando la temporada invernal (que lejos de ser árida, tiene su propio encanto por las grandes decoraciones de Navidad y el paisaje nevado allá donde mires) Suiza tiene un clima suave y agradable el resto del año que te permite hacer una infinidad de planes al aire libre.

Mentira no.4: Suiza es caro
Decididamente no me he ido de intercambio a un país donde la vida sea asequible para cualquiera, pero con la mentalidad apropiada de estudiante de Erasmus, uno se puede organizar para no gastar mucho. Sabiendo a qué supermercados ir, como Lidl o Aldi, dónde comprar cosas básicas a buen precio, los sitios en los que tomarse algo no suponga un agujero en la cartera, y el cómo moverse en transporte con abonos más que rentables, la vida se vuelve mucho más asumible y parecida a lo que uno se encuentra en otros destinos Erasmus popular como Francia o Italia. Además, un extra a tener en cuenta es que el estado suizo (no la UE) te proporciona una ayuda mucho más generosa, además de otros descuentos y facilidades para salir adelante.

Mentira no.12: En Suiza se trabaja mucho
Aquí tengo que romper una baza en favor de nuestra tierra, y es que a pesar de la fama que tenemos de perezosos y vagos, y la buena fama que tienen los países germanófonos en cuanto a diligencia y trabajo, en este país la gente se toma la vida con mucha filosofía. La administración pública aunque eficaz, no siempre es rápida. Ésta tiene unos horarios muy escuetos donde encontrar ayuda fuera de ellos o por un canal distinto a ‘en persona’ es cercano a imposible.

Mentira no.16: En Suiza con el inglés te basta
Aunque esto es verdad si solo te mueves por las grandes ciudades como Zúrich, Ginebra o Basilea, la realidad es que fuera de ellas no es tan común que la gente hable bien inglés. Al ser un país con cuatro lenguas oficiales (alemán, francés, italiano y romanche), tienes más posibilidades de encontrar alguna que sepas con la que puedas apañártelas. Aun así, en función del cantón (región) en el que te encuentres uno u otro será la oficial y la mayormente hablada, así que conviene saberse un buen puñado de básicos de cada uno para poder pedir un café o ir a comprar a un supermercado.

Más allá de lo que os he comentado, que es un poco crítica doble al prejuicio a veces excesivamente generoso y otras injustamente peyorativo que tenemos los españoles hacia Suiza, mi experiencia aquí está siendo sobresaliente. La gente es muy amable y atenta, donde te sorprende una mezcolanza entre la practicidad y rectitud germana y la cercanía y extroversión propia de italos y galos. Este crisol cultural europeo es apreciable en cualquiera de sus ciudades, pero os recomiendo verla con vuestros propios ojos visitando las distintas regiones que lo conforman, donde seguro que disfrutaréis mucho y acabará por encantaros tanto como a mí. En definitiva, para que veáis hasta qué punto es tal mi satisfacción con este intercambio, que al principio solo me iba a quedar un cuatrimestre, pero tras verme tan a gusto, decidí solicitar una prórroga que me concedieron sin problema alguno.

Este es un país muy bueno para un estudiante equilibrado, que quiera disfrutar de una infinidad de planes distintos (desde fiesta y ocio nocturno hasta senderismo, esquí y otras actividades al aire libre) y viajes variados (moverse por Europa es realmente barato y rápido desde aquí), pero que también quiera recibir un buen complemento a su educación y formación. Esta última aquí destaca por su sencillez y lo asequible que es, pero sobre todo por el gran énfasis en lo práctico que le ponen desde el principio. Ya sea desde la propia universidad o en conjunción con ella, avanzar y dar los primeros pasos en la vida profesional es tremendamente sencillo, donde verte colaborando con
empresas prestigiosas de distintos sectores es la norma.. Por lo tanto es un gran destino, completo en muchos aspectos y que sin duda dejará una buena señal en ti, como experiencia de vida, y en tu expediente como experiencia universitaria que es.

A pesar de que lo recomiendo a cualquiera que lo esté considerando (e incluso si no está en su radar) sobre todo creo que es ideal para personas que estudien carreras más prácticas, en el ámbito de la ingeniería y empresa, por lo previamente mencionado. Con estas palabras me despido, espero que os haya gustado y esta entrada haya servido para que podáis ver con otros ojos a este gran y bello país.

ELUMNI

Elumni – La educación que queremos

Por: ELU Admin

A finales de octubre tuvo lugar la conferencia del ciclo #LaEducaciónQueQueremos de la Fundación Botín y la Fundación Edelvives sobre el papel de los jóvenes en la sociedad del futuro.

La sesión estuvo moderada por Lucía Sánchez #ELUMNI9 y contó con la participación de José María Elola Oca #ELUMNI6 —cofundador y codirector de Nikarit (impacto social y sostenibilidad) en Benín— y Dr. Mario De Miguel Ramos #ELUMNI1 —cofundador y asesor de Sorex Sensors (tecnología y empresa)—. Ellos compartieron sus experiencias y reflexiones junto a Silvia Fernández —fundadora y presidenta de Artepaliativo (arte y salud) — y Andrea Sabio —fundadora y directora de Human Up (educación y desarrollo rural)—.

Os compartimos el vídeo resumen de esta sesión con ELUMNIs: https://www.youtube.com/watch?app=desktop&v=4q6z1cynAoo

Vida ELU

Elus por el Mundo – Jaime Osorio

Por: ELU Admin

¡Hola a todos! Aquí Jaime Osorio, desde La Haya, Países Bajos. Este es mi último año de uni, pues estoy en 5º de Derecho y Relaciones Internacionales en la UFV y 4º de ELU. Si ya de por sí iba a ser un año “divertido” con prácticas, dos TFGs y el TFELU, ¿por qué no meter un Erasmus entre medias? Por supuesto que esta no era la idea que tenía al principio (pretendía haber venido aquí hace dos años), pero sinceramente creo que está siendo un buen momento para vivir esta experiencia.

Han pasado ya más de tres meses desde que aterricé en esta ciudad. Venía con miedos, dudas e inseguridades, pero también con ganas de cambiar de aires y demostrarme que podía desenvolverme perfectamente alejado de las comodidades de Madrid. Afortunadamente, ya a estas alturas puedo comprobar las numerosas ocasiones en las que me he puesto en juego y las mejoras que he conseguido a nivel personal.

¿Cómo es la vida aquí? Pues resido en un edificio de estudiantes, tengo mi propia habitación y comparto cocina y baño con David (República Checa), Ángel (Barcelona) y Klaudius (Alemania). Es una suerte tener unos compañeros con los que sentirte cómodo y considerarles amigos, pues la convivencia es mucho más fácil. Por no hablar de lo increíble que es tener a tus mejores amigos de aquí dos/tres pisos arriba o abajo; nos podemos ver tanto que parecemos una familia.

Por continuar escribiendo sobre los habitantes de La Haya, me sorprendió la enorme cantidad de españoles (e hispanohablantes) que han venido aquí. No me avergüenza reconocer que mi grupo más cercano está compuesto mayoritariamente por madrileños, pero son personas que la vida pone por delante y a las que probablemente no habría conocido si no hubiera venido aquí.

Sin embargo, quiero destacar que La Haya es una ciudad increíblemente internacional (yendo a misa, por ejemplo, me percaté de que habría más de veinte nacionalidades distintas allí presentes), y gracias a ello he ganado soltura tanto para hablar en inglés como para cambiar rápidamente de este idioma al español y viceversa en una misma conversación. No pocas veces nos hemos juntado con nuestros amigos alemanes para visitar algún lugar, montar una fiesta, jugar a las cartas o al póker… y también me vienen a la cabeza todas las personas que he conocido por compartir clase, facultad, deportes o amistades.

Respecto de la uni (The Hague University of Applied Sciences), esta es un ejemplo más de la multiculturalidad de la ciudad. Hay un sinfín de asignaturas (la mayoría de 15 créditos, por tanto, como dos o tres de España) en inglés y están enseñadas de una manera mucho más práctica que en España, algo que se agradece como estudiante de Derecho. Destaco especialmente la asignatura que he cursado de Unión Europea, donde he realizado desde un podcast simulado hasta una infografía, haciendo también las veces de abogado en cuestiones de ciudadanía europea. Esto, junto con dos trabajos más académicos y sin necesidad de un examen, me ha permitido comprender por fin cómo colaboran entre sí la Comisión, el Parlamento y el Consejo.

Además, la universidad tiene actividades prácticamente todos los días, y a los estudiantes de Erasmus nos trataron muy bien desde el principio. Por ejemplo, la asociación de estudiantes de Derecho nos explicó cómo hay que redactar y citar los trabajos aquí, lo cual fue de gran utilidad. También nos llevaron a conocer la ciudad de Delft, y gracias al departamento de deportes he podido jugar al bádminton o al ultimate frisbee (juego por equipos en el que hay que pasarse el frisbee sin que lo intercepten). Tampoco me olvido de la feria de prácticas, el torneo de FIFA y otros videojuegos o la proyección de películas como Grease. En definitiva, estudio en una universidad enorme y dinámica, y encima vivo a cinco minutos de ella.

Erasmus es, asimismo, tiempo de viajar y conocer (a poder ser como peregrino y no como turista, según las palabras de Juan Serrano). Si dentro de La Haya visité el Mauritshuis con el archiconocido conocido cuadro de La joven de la perla, por un precio reducido me he podido acercar a otras ciudades como Ámsterdam, Leiden o Róterdam, tierra de Erasmo. Y fuera de Países Bajos, disfruté muchísimo caminando por Budapest (donde me encontré con Clara, de 4º de ELU) y estaré disfrutando cuando se publiquen estas líneas (saludos desde Cracovia, Polonia). Precisamente volviendo de Budapest, me sorprendí experimentando la sensación de que estaba retornando a mi “casa”, una habitación de un edificio gigante de La Haya. Si esto me lo dicen hace no tanto tiempo… vamos, ni me lo imaginaba.

Pero sí, La Haya es mi casa. Una ciudad tranquila de un país más acogedor de lo que pensaba, con sus molinos, canales, bicicletas y habitantes en su mayoría angloparlantes (asignatura todavía un poco pendiente en España). En ella sigo viviendo una experiencia que supone un cierto alto en el camino, en la que me sorprendo exponiéndome en situaciones en las que antes no me atrevía y que por supuesto me hace valorar con cariño todo lo bueno que tiene mi país de origen. Animo a todo aquel que pueda a sumergirse en esta experiencia pero, como ya hemos aprendido, se puede admirar y buscar bien, verdad y belleza en los rincones más insospechados.
Un abrazo, ¡y a seguir viviendo!

Sin categoría

Beers and Books – Miguel Mañara

Por: ELU Admin

El pasado domingo 20 de noviembre tuvimos la primera reunión de Beers and Books. La obra elegida en esta ocasión fue “Miguel Mañara” escrita por Oscar Milosz.

El autor nació 1877 en la actual Bielorrusia y realizó sus estudios en París sobre civilizaciones mediterráneas, egipcias, asirias y hebreas. Publicó varios poemas, novelas y ensayos. En la Primera Guerra Mundial se vio obligado a unirse al cuerpo de prensa de la Armada francesa bajo el mando ruso.

Posteriormente, en 1931, se le otorgó el honor de ser miembro de “la Légion d’honneur”. Falleció debido a un infarto el 2 de marzo de 1939. La obra que nos congrega, “Miguel Mañara” es una de sus más emblemáticas. Nos hizo mucha ilusión poder reunirnos de nuevo y hacer ELU desde nuestro particular club de lectura. ¡Muchísimas gracias a todos los que os conectasteis, y a los que no, os animamos a leerla antes de la reunión final con ponente, con fecha todavía por concretar!

Cultura

mARTEs – El rapto de las sabinas

Por: ELU Admin

El rapto de las sabinas, 1582. Juan de Bolonia.

A lo largo de la historia, este episodio mitológico ha sido objeto de una representación artística ampliamente heterogénea, quedando plasmada en la obra de autores tan emblemáticos y variados como Rubens o Picasso.

Hoy, os traemos esta impresionante escultura de más de cuatro metros de altura modelada por Juan de Bolonia, también conocido como Giambologna, un artista franco-flamenco activo en Florencia durante el siglo XVI.

Al contemplar esta obra, es inevitable fijarse en la compleja torsión de los cuerpos que dota a la figura de un gran dinamismo, además de concederle una proyección cambiante, dependiendo del punto desde el que sea observada.

Actualmente, la escultura original se puede encontrar en la Academia de Florencia, aunque se conserva una réplica en la Piazza della Signoria, en Florencia, donde fue colocada inicialmente por orden de Francisco I de Médici.

Sin categoría

Una gota de agua más- Jorge Úbeda

Por: ELU Admin

Este verano tuve la oportunidad de pasar el mes de julio cooperando en un orfanato en Perú. Esta era la primera vez que me embarcaba en un proyecto así: lo tenía en mente desde hacía tiempo, pero quizás nunca lo había emprendido por el miedo o el vértigo que genera a primera impresión. A lo largo del año 2022, fui a distintas reuniones organizada por la fundación ESYCU para ir conociendo poco a poco en qué consistiría el proyecto, y para entender las condiciones del orfanato en el que estaríamos realizando la labor los voluntarios que íbamos.

Principalmente, los voluntarios trabajamos en el Orfanato Casa de la Divina Providencia, que se encuentra en Abancay; a cuatro horas de Cuzco. Abancay es una ciudad muy pequeña, pero con muchos habitantes, todos ellos sin recursos. El orfanato allí acogía, mayoritariamente, a niñas que habían sufrido violencia o maltrato por alguno de sus progenitores. Hablamos de niñas de 6 a 15 años de edad, de las que sus padres renegaban: niñas heridas física y psicológicamente. Y por ese motivo, necesitaban mucho cariño y tacto. Las religiosas que llevaban el centro, intentaban hacerse cargo, como buenamente podían, de dar alimento y techo a las menores.

El día a día de los voluntarios variaba dependiendo de la semana de la que se tratase y el nivel de distracción (colegio y visitas) que tuviesen las niñas en el orfanato. Por las mañanas, mientras las niñas acudían a la escuela o al instituto, los voluntarios preparábamos los juegos y actividades que a su vuelta realizaríamos con ellas; o en otros casos, ayudábamos en la panadería que tiene el Orfanato adscrita para sacar fondos con los que poder mantener a las niñas. Otras veces, echábamos una mano en la construcción, reparación y aseo del Hogar: arreglábamos las salas comunes, construíamos tabiques para separar edificios que por su pobreza conectaban con el resto del vecindario, limpiábamos y acondicionábamos lo que en su momento era la guardería del orfanato…

Más tarde, cuando las niñas regresaban del colegio (les encantaba que fuésemos a recogerlas del colegio, como hacían los padres del resto de niños), les dábamos toda nuestra atención y nos dedicábamos enteramente a ellas: talleres, juegos, deportes, refuerzo escolar… Al final, se trataba de hacerles sentir un poco acompañadas y queridas, en el oasis que era el orfanato para ellas.

En los talleres dividíamos a las niñas en dos grupos: el grupo de primaria y el grupo de secundaria; para que pudiese ser más colaborativo y participativo, y adecuábamos el contenido a lo que podrían entender. Así, con cuentos y cinefórums tratamos temas como la sinceridad (con el cuento de Pinocho), tratamos el compañerismo, la autoestima, la bondad, la importancia del trabajo y del estudio…

Les intentamos enseñar la importancia de la universidad y de los estudios. Es mucho lo que tienen que trabajar y estudiar para poder ir a la universidad. Sabiendo que carecen de sustento económico, necesitan recibir una beca para irse a Lima a estudiar una carrera. En otros casos, las niñas, al cumplir la mayoría de edad, abandonaban el orfanato para realizar trabajos precarios, inseguros y abusivos.

Cuando abandonamos Abancay a finales de julio, pudimos entender que al final para los niños del orfanato, solo éramos una persona más que pasaba por esos lugares; pero para nosotros había sido algo transformador. Aprendí mucho de todas las niñas del orfanato; de la gente de allí: desde su actitud para afrontar las cosas, su sencillez, su gratitud, su “saber lo que importa de verdad”. Y me volví a España “lleno” de haber podido aportar, aunque sea pequeño; milésimo, un granito de arena en la felicidad y futuro de lasa niñas.

Vida ELU

Elus por el Mundo – Nacho Artero

Por: ELU Admin

Querida comunidad ELU, soy Nacho Artero, alumno de 4º de la Escuela de Liderazgo y de Derecho y Business Analytics en la Universidad Pontificia de Comillas, ICADE. Hasta diciembre estoy viviendo una experiencia hasta ahora inolvidable: poder realizar mi Erasmus en Roma.

Visto que el anterior Elus por el Mundo versa también sobre la Ciudad Eterna, y que Alberto hace de la experiencia de vivir en ella una descripción magnífica, en esta columna me centraré en lo práctico.

En primer lugar, conviene destacar que el Erasmus, antes que nada, es una experiencia académica. Este dato de no menor importancia parece perderse entre tantas otras vivencias, pero conviene no olvidarlo del todo. Mi universidad aquí es la LUISS Guido Carli, una prestigiosa institución privada de muy difícil acceso para los romanos y con tres campuses repartidos por la ciudad y que consisten en amplios palacetes con jardines. Durante mi estancia en Roma estoy cursando Derecho, y debo confesar que estoy fascinado con el plan de estudios de esta universidad: los profesores son excelentes y las asignaturas que he podido elegir, muy interesantes.

Además de la LUISS, que no es de las universidades más concurridas, los Erasmus estudian en otros muchos centros. De entre ellos destaca la Universidad de La Sapienza, una macro universidad pública situada cerca de la estación de trenes de Termini y muy prestigiosa también a nivel internacional. Si tienes la oportunidad de ir a Roma de Erasmus, lo más probable es que te toque esta institución.

En segundo lugar, me gustaría advertiros acerca de la odisea que es conseguir piso de estudiantes aquí. Mi consejo es que una vez sepáis vuestro destino, os pongáis a buscar piso inmediatamente y no confiéis en el “llego allí sin piso y busco inmobiliarias”. Eso pensaban también cientos de estudiantes españoles y muchos han tenido que volverse por falta de oferta. Los mejores portales son Spotahome y similares, y recomiendo no reservar por webs poco conocidas, ya que la cantidad de estafa de las que he oído hablar es sorprendente. Por otro lado, el alojamiento en Roma deja mucho que desear casi siempre: las casas, por mucho que puedan tener todo lo necesario para vivir en ellas, suelen ser cutres. Olvídate de tener salón, por cierto.

Por último, no puedo despedirme sin aportar un par de consejos acerca de la gastronomía romana. Os pediré un favor, no vayáis a Fortunata ni a Tonnarello. Sí, lo sé, Instagram y Tik Tok babean con estos restaurantes, pero si vais a Roma de Erasmus debéis comportaros como romanos y no como turistas. Por lo general, si escucháis hablar inglés entre los clientes del local, suele ser un “tourist trap”. Con una excepción: el magnífico Da Enzo al 29, custodio de la mejor carbonara de Roma según dicen. Tendrás que hacer un poco de cola en la calle pero merece la pena. Asimismo, te recomiendo que vayas a Baffeto para probar una auténtica pizza romana.

Roma es inagotable y de ahí su encanto. Si vienes, déjate llevar por sus calles y ¡deja el reloj en casa!

Vida ELU

Los elus van al teatro

Por: ELU Admin

Ignacio Cascón, elu de 3º

El pasado sábado 5 de noviembre un grupo de 10 elus nos juntamos por iniciativa de mARTEs de arte para ir al teatro

La obra que vimos fue: La cabeza del dragón, escrita por Valle-Inclán a principios del siglo XX. Se trata de una farsa, un cuento (en principio infantil, pero la verdad es que de infantil no tenía mucho) del que se podían hacer multitud de lecturas y estaba magníficamente traído a la actualidad por la directora Lucía Miranda. Una obra muy divertida que nos sorprendió y no dejó indiferente a nadie.

Jimena Rodríguez, de 3° lo relata así: “Creo que no hay nada mejor que disfrutar una de obra de teatro en compañía, y si esa compañía son elus ya ni os cuento. Gracias a lo que compartimos tras la obra (una buena cena en el Vips) fuimos capaces de darnos cuenta de cosas que nos habían pasado desapercibidas . Así, pudimos sacar más juguillo a lo que acabábamos de ver y elevar a la máxima potencia la experiencia del teatro.”

El despliegue visual y la puesta en escena eran impresionantes, todo un espectáculo de marionetas traído al María Guerrero, invadiendo asientos y palcos indistintamente. Un espectáculo con música en directo, bailes aflamencados, voces fuera de lo común…

Sin olvidar el texto, lleno de guiños y críticas mordaces e irónicas a la tradición, al conformismo, al egoísmo…
Nos hizo replantearnos principios, sacó temas de conversación para la cena, recomendamos lecturas, poemas, conferencias… y sobre todo sirvió para ponernos al día! (Elumnis y profesor incluido).

¡Sin duda, lo pasamos genial y esperamos repetir pronto! ¡Os esperamos a todos!

Vida ELU mARTEs – Día Mundial de la Radiología

mARTEs – Día Mundial de la Radiología

Por: ELU Admin

¿Sabéis qué día es hoy? Bueno, además de ser martes, y de ser 8 de noviembre, es el Día Mundial de la Radiología. Si os habéis hecho una radiografía alguna vez, ¡tenéis mucho que celebrar! El mundo del arte también estuvo de enhorabuena al descubrirse los rayos X: en 1897, dos años después de que Wilhelm Röntgen los detectara, se realizó la primera radiografía a una obra de arte. Actualmente, es un procedimiento muy común en museos de todo el mundo.

Prueba de su relevancia son dos casos que os presentamos hoy:

  • Las hilanderas, de Diego Velázquez. El hecho de que esta obra apareciese en un inventario en 1664 con unas medidas, y un siglo más tarde, con unas mayores, hizo sospechar a los historiadores del arte que se había realizado un añadido posterior. Esta hipótesis se pudo comprobar al realizar una radiografía al cuadro: la pintura original absorbe más los rayos X, lo que delimita bien el añadido (se cree que se pintó para poder exponer la obra en el nuevo Palacio Real). Gracias a estos límites exactos, el Museo del Prado pudo diseñar en 2021 un marco que devuelve el cuadro a sus dimensiones originales.
  • El Jardín de las Delicias, de El Bosco. Ya hablamos de esta inagotable obra en la tercera entrega de nuestra sección Favoritos, que os recomendamos. Pero no dijimos todo… Inspirado por el uso de rayos X, al holandés van Asperen de Boer se le ocurrió aplicar la radiación infrarroja a cuadros. El carboncillo utilizado por los artistas para dibujar absorbe más estos rayos que la pintura; por tanto, esta técnica (reflectografía infrarroja) permite ver el dibujo inicial y su proceso creativo. Como un fantasma, sobre el rostro de Dios Padre en la escena del Paraíso aparece un rostro con barba completamente distinto, revelándonos el cambio de idea de El Bosco.
Vida ELU

mARTEs – Interior

Por: ELU Admin

¡Qué privilegio poder continuar nuestro proyecto! Hoy, nos sentimos afortunados de contar con las palabras de Rosa Leal, estudiante de primero de Historia del Arte en la Universidad Complutense de Madrid (y de tercer curso de la ELU). Verdaderamente, se ha sumergido en la obra que nos trae, deteniéndose en cada detalle y lo que significa para ella. Una reflexión genial sobre la mirada en el Arte:

«Clive Smith es un artista inglés nacido en 1967. Esta obra pertenece a la colección ‘Interiors’, la cual es iniciática en cuanto a la producción artística de Clive Smith, situándose en los años cercanos al 2000. La colección inmediatamente posterior se centra en la figura humana de nuevo; sin embargo, el resto de sus colecciones contienen estudios de aves, nidos y plantas. El carácter aséptico de las obras, la falta de interacción entre las figuras y la soledad que irradian sus composiciones caracterizan la colección.

En Interior el protagonista masculino se encuentra sedente, entre dos puertas aparentemente iguales, aunque incapaz de abrir ninguna de las dos. Sus manos se entrelazan sobre su regazo, ambos brazos quedan ocultos bajo la camiseta blanca que lleva puesta, por lo que las mangas esta?n vaci?as, dando una apariencia inicial de no tener brazos. Incluso podría recordar a una camisa de fuerza, aunque claramente no lo es. Este vestuario estándar, compuesto por una camiseta blanca y unos pantalones caquis, es utilizado a lo largo de numerosas obras pertenecientes a ‘Interiors’, despojando a las personas de rasgos distintivos entre ellas. La mirada se dirige hacia abajo, la expresión es neutra. Es difícil hablar de inexpresividad cuando la pesadumbre y el cansancio acompañan al rostro.

La incapacidad de decisión es clara. A pesar de haber dos caminos por los que discurrir, la figura decide quedarse en el centro de esta ambivalencia, completamente incapaz de tomar una decisión. La libertad ilusoria ante la abundancia de posibilidades le abruma, conteniendo sus brazos en su camisa de fuerza particular, dejándole indefenso, despojado de vitalidad y de cualquier iniciativa. Se limita a reclinarse sobre ambas puertas, siendo consciente de que es uno más, que solamente es un hombre con una camiseta blanca y unos pantalones caquis, como muchos otros. Su identidad es desconocida, el espectador no sabe nada de él y, aun así?, es familiar su angustia, su silencio, su indiferencia. No pronuncia palabra porque no tiene a quién llamar, no hay ninguna ventana, únicamente dos paredes y dos puertas cerradas. Ni siquiera hay cerradura, sería absurdamente fácil abrir una de ellas, pero la opresión de la ambivalencia se lo impide.

Lo verdaderamente tétrico de Interior es la frontalidad, relacionada por los griegos con la otredad. El encuentro con el Otro cara a cara, donde realmente el espectador no descubre diferencias, sino similitudes con aquel que parece tan lejano. Clive Smith muestra un espejo donde dos personas, en un intento de mirarse, bajan unos ojos inundados por la culpa o la vergüenza».

Vida ELU

Una gota de agua más – Jaime López

Por: ELU Admin

Hace ya un año tuve la gran suerte de entrar a formar parte de una de las asociaciones de mi universidad; Perunidad se llama y desde el primer momento que supe de la existencia de esta, me llamó la atención. Su labor consistía en encargarse de la organización y realización de varios proyectos, en colaboración con distintas ONGs, que buscan ayudar al desarrollo de la educación y la sostenibilidad en regiones desfavorecidas de Perú, comenzando con la recolección de fondos, durante todo el año, a través de organización de eventos, competición por subvenciones y premios solidarios, etc. Hasta la realización en sí del proyecto, con nuestras propias manos, en el lugar escogido.

El enfoque particular de este proyecto me atrajo debido al hecho de que este no se nos daba ya organizado, había que montarlo entero. Además, estaba un poco más relacionado con aquello que estudio, ingeniería, al estar centrado en la construcción de infraestructura.

Es así, que a mi y a otros tres de mis compañeros nos tocó colaborar con una pequeña ONG, llamada Earth Perú, creada por el carismático Luis Fernando Abanto. Un hombre que tras haber dedicado bastantes años de su vida a colaborar con diferentes organizaciones, decidió fundar su propia ONG para ayudar, en concreto, a los diferentes colegios de las zonas más desfavorecidas de la ciudad de Trujillo, ciudad a la que llega mucha de la inmigración descontrolada de la sierra, la cuál se establece en los barrios periféricos como puede, careciendo de medios e infraestructuras.

De este modo, comenzó la búsqueda y planificación del proyecto, con reuniones de trabajo y llamadas con nuestro apreciado Luis, que sin embargo no estuvieron desprovistas de sustos e imprevistos, como el de tener que reorganizar la mayor parte del mismo a dos meses de partir, puesto que una de las escuelas con las que nos habíamos decidido a colaborar dejó de comunicarse con nosotros; inesperado cambio de opinión.

Finalmente, llegó la fecha de partir a Perú. Durante el próximo mes y medio nuestro objetivo sería el de construir una clase en el colegio “Marcial Rebaza”, en la Campiña de Moche, pueblo agrícola y humilde a las afueras de la ciudad. De esta forma, el excedente de niños del pueblo que la escuela no podía asimilar y que debían buscar otros sitios donde estudiar, podrían continuar su educación en el colegio del pueblo.

Así, una vez allí, tras conocer el lugar, las profesoras y a los niños, comenzamos las obras, fundamentalmente, gracias a la ayuda de nuestro maestro albañil, Juan, el que con mucha paciencia nos enseñó los secretos de esta profesión, por la cuál siento actualmente una gran admiración. Seríamos estudiantes de ingeniería, pero no teníamos ni idea de como poner un ladrillo al lado de otro.

Las semanas fueron pasando, y como en todos los proyectos de este mundo, las dificultades y retos inesperados fueron apareciendo, haciendo difícil el mantener la moral y la esperanza arriba; al fin y al cabo, la logística y los medios que allí teníamos eran limitados, sin embargo, poco a poco fuimos superándolos, y tras remover bolsas y bolsas de cemento, colocar una infinitud de ladrillos y dejarse los brazos enluciendo paredes, logramos que la clase se convirtiera en un espacio funcional. Mención especial a lo importante que durante todo el proyecto fue la ayuda y colaboración con la comunidad local, incluyendo a las profesoras y a madres y padres, que cuando necesitamos una mano, nos pusieron todas a una.

Sin embargo, aquí no terminó la historia, puesto que siendo Earth Peru una ONG que busca favorecer el desarrollo sostenible de estas escuelas, aún quedaba acabar con la guinda del pastel. En Perú, hasta el 2022, los padres de los niños debían pagar la electricidad de las escuelas, y es por ello, que hasta ese año, nuestra asociación había estado financiando la instalación de paneles solares en las escuelas donde colaborábamos, puesto que ayudaban a que estas fueran más verdes y permitían a la comunidad realizar un gran ahorro económico. No obstante, habiendo cambiado la situación, la escuela no estaba interesada en la instalación de los paneles, siendo estos más una carga que una ayuda.

Así pues, debimos cambiar de nuevo el desarrollo del proyecto y ponernos en búsqueda de un nuevo lugar donde estos pudieran tener un mayor impacto, siendo de utilidad. Encontramos así, un orfanato situado en la zona industrial de Salaverry, el cual, a pesar de trabajar para el Estado, no recibía ninguna ayuda, al estar dirigido por una congregación religiosa. Allí nos recibieron con los brazos abiertos, y pudimos instalarlos, con la seguridad de que aportarían una gran ayuda y serían bien cuidados.

Durante las seis semanas que allí estuve, pude aprender muchas cosas, además de ser testigo de las condiciones de vida tan diferentes que tienen tantas otras personas en la otra punta del mundo, las cuales tienen que vivir su día a día, con muchos menos recursos y muchas más barreras, y aunque sintiéndome en cierto modo egoísta por haberme tenido que desplazar allí para ser más consciente de cómo es la cruda realidad, creo sinceramente que mereció la pena, porque aquello que construimos podrá permitir, a partir de ahora, que unos cuantos niños, en las afueras de la ciudad de Trujillo, tengan un futuro un poco mejor. Y eso ya lo vale todo.

ELUMNI

Elumni – Misiones

Por: ELU Admin

“Es un momento de reencuentro con uno mismo, de escucharte, de quererte y de ofrecer todo lo bueno que tienes a los demás. Es un momento para saber qué es para ti lo importante en la vida. Es un momento que te ayuda a llenarte el alma de paz y tranquilidad”.

Cristina López Crespo #ELUMNI08 comparte con nosotros su experiencia en las Misiones Alumni UFV en Tánger de este verano y recuerda aquellos aprendizajes vitales que se llevó de su paso por la Escuela de Liderazgo Universitario.

Enlace del vídeo: https://vimeo.com/771947252