Elus por el Mundo – Isabel Carmen

12 FEB

¡Hola a todos!

Soy Isabel Carmen, estudio medicina en Zaragoza y soy estudiante de 4º de la ELU, pero lo que más diría que soy ahora mismo, es una estudiante de Erasmus en Bratislava.

Hace ya cinco meses, empezó esta aventura subiéndome a un avión para vivir fuera de casa por primera vez, sin estar arropada por mis familiares y amigos de siempre, para finalmente terminar arropada por mis nuevos amigos, que se acaban convirtiendo en la familia de aquí.

A la hora de tomar la decisión de irme de Erasmus, no tuve ninguna duda, ya que la Isabel de hace 6 años que fue a ver a su hermano a París ya había tomado la decisión por mí. Por otro lado, la oportunidad de vivir en lo que los eslovacos llaman “el corazón de Europa” me llamó especialmente por la posibilidad de viajar en autobús o tren por todo Europa fácilmente (según la capacidad de dormir en transportes de cada uno). Tengo que decir que este aspecto lo he aprovechado al máximo, sin parar casi ningún fin de semana en Bratislava, pero conociendo la cultura, la gastronomía y la historia de grandes y pequeñas ciudades por todo Europa.

Sin embargo, como dice una muy buena amiga del Erasmus, no todo es viajar porque lo mejor está siempre en casa, y es que no puedo sentirme más afortunada de las personas que me acompañan en esta aventura. Aunque las primeras
semanas supusiera un poco de agobio conocer a los más de trescientos españoles con los que comparto la residencia, al final todo toma su lugar y yo puedo decir con toda la seguridad que estoy justo donde tengo que estar.

Durante este año, también tengo la oportunidad de aprender en un sistema sanitario muy distinto al que estoy acostumbrada en mis prácticas de España. El mayor obstáculo que encuentro es el idioma, ya que la mayoría de los pacientes solo hablan eslovaco y puede llevar a momentos de frustración al no poder entenderse con ellos. Sin embargo, este aspecto provoca unas prácticas más colaborativas en las que cuento con mis compañeros para entender a los pacientes pero también cuentan conmigo para hacerles preguntas y llegar a conclusiones.

Toda esta nueva vida se traduce en un crecimiento personal, un conocerme más a través de los otros, y sobre todo una gran oportunidad para no pasar de puntillas por esta experiencia, siendo consciente de que se acabará y habrá que saber llevar todo lo aprendido a mi vida de Zaragoza.

En definitiva, espero haber sido capaz de contar y compartir todo lo bueno que me está dando el Erasmus, e intentar que si habéis llegado hasta aquí, os den un poco más de ganas de vivir esta gran experiencia.

Un abrazo,

Isabel