ELUS POR EL MUNDO – CAROLINA DOLADO
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Siguiendo las memorias de Stefan Zweig, escogí Europa. Llegué en septiembre a Austria, en concreto, a Graz, ciudad centroeuropea con un brazo tendido hacia Europa occidental y otro hacia Europa oriental. Esta ciudad barroca es la segunda más poblada de Austria, con casi unos trescientos mil habitantes. Su pequeño tamaño y su ambiente universitario, hacen que una madrileña, acostumbrada a las largas distancias y al transporte público, pueda disfrutar sin prisa de los parques, del río, de las calles y de los escondidos patios austríacos.
Como estudiante de Derecho y Economía de la Universidad Carlos III de Madrid, es una gran oportunidad sentarme en las aulas de la Karl-Franzens-Univesität Graz, heredera de la Escuela Austríaca de Economía. Pero Graz no es solo uno ciudad para economistas. Sus universidades, tanto la Karl- Franzens como la Technische Universität Graz, han acogido en sus aulas a personajes como Nikola Tesla, Ludwig Boltzmann, Joseph Schumpeter. Esta ciudad ha dado varios Premios Nobel, tanto en medicina y en física como en química.
Para que os hagáis una idea de la localización de Graz, os dejo esta breve pero bella descripción de la provincia de Austria donde está situada.
“Estiria se lanza hacia la lejanía en pos del Sur. Partiendo del dominio de las nieves perpetuas, hasta las colinas cubiertas de viñedos, varían los paisajes con la dominante del bosque y de los conocidos terrenos de caza que han valido a esta provincia el nombre de “marca verde”. Verdes también son los pastos de los valles, de las llanuras y de las alturas; y verdes son las aguas de arroyuelos, ríos y lagos.”
Herbert Mühlbauer, 1962, sobre Estiria.
Como ciudad fronteriza entre las dos Europas, vivir en Graz permite conocer ambas ya sea cogiendo un tren o un autobús. Desde que llegué ya he visitado ciudades como Zúrich, Praga, Viena, Liubliana, Trieste, Venecia y Salzburgo. Y durante el siguiente cuatrimestre hemos organizado un viaje para conocer los países ex yugoslavos: Serbia, Montenegro, Bosnia, Croacia… Graz es un gran punto de partida para descubrir qué significa ser europeo.
En el aspecto académico, la universidad exige trabajo semanal, ya sean por trabajos en grupos, presentaciones o prácticas, además de posteriores exámenes parciales y finales. Un aspecto que diferencia las universidades de Austria con las de España es la cantidad de horas de clase a la semana por cada asignatura. Tan sólo hay entre hora y media y dos horas de clase, permitiendo más tiempo para estudiar y preparar los trabajos y exámenes.
Si os interesa aprender alemán, tanto las universidades como academias particulares ofrecen cursos durante todo el año, extensivos como intensivos, por un precio bastante más razonable que en España. Al ser estudiantes tenemos descuentos, en algunos casos, de más de la mitad del precio.
¿Cómo compaginar la ELU con irse de Erasmus? Aunque acudir a las actividades presenciales tiene su dificultad económica, en el resto de los aspectos, gracias a las nuevas tecnologías, hay muchas facilidades para llevar a cabo, en mi caso, el proyecto final con mis compañeros. De seis miembros, tres estamos en el extranjero, dos en ciudades andaluzas y uno en Madrid. A pesar de la distancia, nos reunimos casi todos los lunes, vía Skype, para ponernos al día en los avances. Nuestro proyecto presenta como objetivo principal difundir la obra de Ignacio Valle Garagorri, del que ya habéis oído hablar por la exposición que varios alumnos de la escuela organizamos el pasado junio. Os invitamos a que vayáis a las exposiciones que se van a realizar sobre él y su obra tanto en enero como en febrero.
Exposición de enero: Del 11 al 30 de enero | Exposición: TEORÍA MOLECULAR CURVISTA de Ignacio Valle Garagorri | Sala Martín Chirino, San Sebastián de los Reyes. (Universidad Popular José Hierro).
Me despido invitándoos a que hagáis las maletas y os vayáis a donde más os llame el corazón. Si por algún casual, es Graz, no dudéis en escribirme.
¡Feliz año!