Álvaro Abellán

Vida ELU

FdS ELU Ocio – Viernes 15 de noviembre

Por:

TRAVESÍAS

MSI:
Este Fin de Semana empezaba un tanto peculiar. Comenzamos visitando el Motor Sport Institute de la mano del Administrador Único Teo Martín y algunos estudiantes del centro.
Sus instalaciones no tenían nada que envidiar a algunos de los mejores equipados Centros de Alto Rendimiento del mundo automovilístico, haciendo que los estudiantes del MSI consigan una de las mejores formaciones en el campo de la Ingeniería.

Travesías:
Una vez terminada la visita al museo, nos sentamos en la sala común donde nos recibieron Carola Díaz de Lope-Díaz y Juan Serrano (quien ha tenido la suerte de convertirse en padre recientemente) dándonos una calurosa bienvenida y presentándonos el esperado fin de semana sobre el Ocio. Inmediatamente y sin más dilación, nos transportamos al salón de la casa de Álvaro Abellán (conocido como filósofo de la comunicación) junto con Juan Rubio (guionista apasionado) y Lucía Garijo (cineasta prometedora) donde presenciamos cómo exhibían sus propuestas cinematográficas para esa noche, poniendo en práctica “El ocio y la vida intelectual” de la que nos hablaba Pieper. La película elegida fue “El Regreso” de Andréi Zviáguintsev; pero por problemas técnicos nos decantamos por “Días de Furia” de Michael Douglas.

Días de Furia:
Esta película nos sitúa en pleno de una Sociedad Individualista Estadounidense, la cual narra el último día de trabajo de un policía, Martin Pendregast, el cual se siente frustrado pues sus compañeros no le dejan hacer lo que más le apasiona, ser policía. Sin embargo, comienza a investigar un caso y a seguirle la pista a William Foster, un individuo que no aguanta más la situación por la que está pasando, y comienza a actuar de una manera violenta ante las distintas situaciones que se le plantean. Bill refleja la figura de una persona que lo ha perdido todo debido a su actitud totalitaria y firme, no sabiendo adaptar su carácter a la sociedad y dejándose llevar en todo momento por su temperamento. Finalmente, Bill es atrapado y fallece tras ser disparado por el comisario Martin, poniendo fin así al complejo día de sucesos desencadenados.

Tras esta película que nos había abierto el apetito nos distribuimos por la sala para cenar. Mientras tanto, dábamos comienzo al cinefórum: la película reflejaba circunstancias delicadas con una cierta ironía y humor que procedía de la personalidad estrambótica del protagonista, pero al que, a la vez, no le faltaba razón en algunos discursos. Nos llamaba la atención cómo el director planteaba las situaciones pero no lograba darles un sentido ni una explicación verdaderamente profunda. También nos resultó llamativo cómo jugaba con el personaje de Bill de forma que podíamos identificarnos con algunas de sus facetas pero, al mismo tiempo, provocarnos repulsión por su forma de actuar.

Finalizada la reflexión y el comentario acerca de la película, terminamos la jornada dirigiéndonos apresuradamente al bus para empezar descansados e ilusionados el día siguiente.

Blanca Labrador Granados
Alejandro De la Vega Ruíz